lunes, 27 de septiembre de 2010

Fomentando la responsabilidad en nuestros hijos

La responsabilidad es un hábito que se aprende de pequeño. Si un hijo adolescente no ayuda en casa, es porque ha sido mal acostumbrado. No queremos que nos pase, no?

Más allá de esto, yo deseo fomentar la RESPONSABILIDAD en ellos porque la considero una herramienta útil en todas las áreas.

Hay distintos tipos de RESPONSABILIDAD:

  • Las personales: son las responsabilidades que tienen que ver con el cuidado del individuo: cepillarse los dientes, bañarse, preparar la mochila, hacer las tareas, etc.
  • Dentro de la familia: son las tareas asignadas al niño para que la familia funcione mejor: no dejar la mochila tirada, colgar la ropa en una silla, poner la mesa, etc. son actividades que se hacen en pos del beneficio de todos.

Hay más, pero nos detendremos en estas 2, pues son las clases de responsabilidad que deseamos inculcar en nuestros hijos.

Armé un cuadro con las responsabilidades dentro de la familia, que incluyen:

Tender la cama, poner y sacar la mesa, juntar la ropa sucia, levantar juguetes del suelo, lavar vasos, barrer, limpiar la mesa, acomodar los zapatos, secar el baño, sacarle el tapón a la bañera, mantener las toallas colgadas, apagar las luces innecesarias, etc.

Cuántas responsabilidades para cada uno?

Cabe aclarar, que no pretendo que mis hijos lleven a cabo todas estas responsabilidades. No. Elegí 3 de ellas, y sobre estas vamos a trabajar. Por lo menos durante un mes. Mis hijos tienen 8, 9 y 4 años. A los grandes les día tres responsabilidades, a la pequeña solo 2. Muy sencillas y fáciles de hacer. Nada más. Metas cortas y simples

Cuando les presenté el cuadro, les encantó. Por los dibujos de las actividades, porque incluí fotos de ellos, y porque eran 3 responsabilidades nada más. Les pareció fácil de hacer. No lo sintieron como si fuera un peso de aquí en más. Eso me gustó. Sentí que le di en el clavo!

Deberé recordarles que miren el cuadro y lo respeten cada día?

El objetivo final es que cumplan con la tarea asignada sin tener que recordarles que lo hagan. Eso es responsabilidad. Lo 'otro' es sólo obediencia. Una instancia previa.

Es más práctico si lo hago yo misma!

Claro! Sé que tendré que armarme de paciencia, ya que por ejemplo, si quiero que tiendan la cama a la mañana cuando se levantan tendría que despertarlos 15 minutos antes, también deberé ''despojarme'' del perfeccionismo, ya que las tareas que habitualmente hago yo como ama de casa, se las estoy delegando a los niños. Qué locura! Pero funciona! Funciona? Ja!

Me toca pensar si habrá o no recompensas. Qué opinan??

1 comentario:

Anónimo dijo...

Muy bueno!! Gracias por brindar herramientas en tiempos en que todo esto es más complejo. Un beso